Los premios Forqué empujan a la serie "Querer" y a la película "El 47" a lo más alto del audiovisual español de este año

Los Forqué arrancaron la temporada de premios con dos claras vencedoras: la serie de Movistar + "Querer" que se llevó todos los premios de su categoría y la película "El 47" que triunfó como mejor título del año y como premio a la educación en cine y valores. Ambas destacan por su carácter social y alto grado de búsqueda de sensibilización en la sociedad.

En una gala presentada por la periodista Elena Sánchez y amenizada por diversas actuaciones musicales de Miquel Fernández, Sole o Asier Etxeandía entre otros, los productores decidieron premiar como mejor serie del año "Querer" de Alauda Ruiz de Azúa y como mejor película "El 47" de Marcel Barrena. La gala, que fue excesivamente sobria y carente de emotividad, no consiguió ser el mejor reconocimiento a 30 años de cine español. 

Sin embargo, hay que reconocer que el amplio abanico de producciones nominadas en sus distintas categorías sí dio visibilidad al buen año que hemos tenido en la producción nacional. En la categoría de series los triunfos obtenidos por "Querer" a mejor serie, mejor actor protagonista para Pedro Casablanc y mejor actriz protagonista para Nagore Aramburu no deben oscurecer el trabajo de otras producciones nominadas que bien podrían haberse llevado algún premio como la entretenida "Celeste", la dura y fabulosamente interpretada "El caso Asunta" o la inspiradora "Yo, adicto". Incluso se olvidaron de la que posiblemente podría estar entre las tres mejores producciones del año: "Nos vemos en la otra vida".

En la categoría de películas todo estuvo más repartido. La gran triunfadora fue "El 47" de Marcel Barrena pero cualquiera de las otras nominadas podría haberse llevado el premio. En un año con tanta variedad la competencia es enorme y posiblemente solo unos pocos votos estén marcando la diferencia. Donde parece haber más unanimidad es en el Forqué a mejor actor para Eduard Fernández por "Marco", un trabajo sólido y bien trabajado que va camino de recoger todos los premios posibles. Más competencia tendremos en los Goya con el de mejor actriz que recayó en Carolina Yuste por "La infiltrada" pero que bien podría haberse entregado a Patricia López Arnáiz por "Los destellos" o Najwa Nimri por "La virgen roja".

En el resto de premios destaca la mejor película de animación para "Mariposas negras", un título que sigue la historia real de tres mujeres influenciadas por el cambio climático, y que se impuso a las teóricamente más favoritas "Buffalo kids" y "Dragonkeeper". También cabe destacar el nuevo premio a mejor película taquillera que impulsa el reconocimiento a los films que han sido reconocidos por los espectadores. Merecidísimo premio para "Casa en llamas" que sin grandes promociones y gracias al boca a boca ha conseguido situarse en un lugar muy destacado en este 2024.

Por lo demás, el aplauso unánime a la Medalla de Honor para el cineasta José Luis Garci que forma parte importante de la historia de nuestra cinematografía y un aviso de lo necesario que es revisar el objetivo de estas galas y su definición como espectáculo promocional. El tedio y el aburrimiento es el peor dato de una gala que no estuvo a la altura de los títulos premiados.

Juan Manuel Martín