"Guardianes del museo", cuando los gatos nos ayudan a valorar las obras de arte

En pocas ocasiones llegan a nuestras pantallas películas rusas y mucho menos de animación. En contadas ocasiones aparecen en la cartelera y es interesante acercarse a otras cinematografías menos habituales. Esto ocurre con "Guardianes del museo" de Vasiliy Rovenskiy que traslada a los más pequeños la curiosa anécdota de los gatos que defienden las obras de arte en el museo Hermitage de San Petersburgo.

Vasiliy Rovenskiy nos presenta una película de animación cuyo mayor valor es saber trasladar el interés en las obras de arte a los más pequeños. Y una buena forma de hacerlo es recrear de una manera amena y divertida la sorprendente historia de los gatos que cuidan los cuadros en el museo Hermitage. Un relato que tiene una base real, ya que hace más de dos siglos, la emperatriz Isabel I de Rusia tuvo una idea curiosa e inaudita para proteger las obras de arte de su Palacio de Invierno, crear un escuadrón de gatos para mantener a raya a los ratones y otros animalillos ávidos de un buen lienzo.

Con el protagonismo del gato Vincent y el ratón Maurice, los espectadores van conociendo los recovecos del museo, la relevancia de mantener los cuadros originales en perfecto estado y conocer cuáles son más icónicos. De hecho el cuadro de la Mona Lisa tiene un papel muy relevante en la película. En realidad, toda la trama parece una excusa para que los niños se interesen en la pintura.

No nos encontramos ante una gran película de Disney o Pixar, pero su técnica es cuidada y más que aceptable. Apuesta por transmitir valores como ser fiel a los amigos, respetuoso con los demás y sobre todo, ser uno mismo. Un recuerdo a que el cine de animación, sobre todo si va dirigido a los más jóvenes, es bueno que transmitan mensajes para crear una sociedad mejor.

Por cierto, como dato curioso, a día de hoy, estos seleccionados felinos, que han mantenido su fiel cometido generación tras generación, son famosos a lo largo y ancho de Rusia, suman unos 70, cuentan con tres cuidadores a su cargo y hasta su propio jefe de prensa.

José Daniel Díaz